Transporte escolar: normas que los padres deben conocer

Transporte escolar: normas que los padres deben conocer

SuperTransporte lanza guía para que prestadores de servicios, centros educativos y padres de familia conozcan las normas que rigen el transporte escolarhttps://www.supertransporte.gov.co/index.php/comunicaciones-2022/supertransporte-lanza-guia-para-que-prestadores-de-servicios-centros-educativos-y-padres-de-familia-conozcan-las-normas-que-rigen-el-transporte-escolar/

Los centros educativos son responsables de contratar empresas que cumplan los requisitos, pero las familias también deben participar.

La legislación en Colom­bia sobre transporte escolar hace referencia a la edad de los vehículos, que no debe sobrepasar los 10 años; a la prohibi­ción de sobrecupo; a un límite de velocidad de 40 kilómetros, y al cumplimiento de revisión técnico mecáni­ca, entre otras normas enfocadas a proteger la vida de los niños que allí viajan,

Sin embargo, los padres pueden trabajar junto con los transportadores, jardi­nes y colegios para lograr que las rutas escolares cum­plan unos criterios básicos de seguridad que garanticen el traslado, sin accidentes, de los niños y niñas entre la institución escolar sus casas.

Para ello es posible revisar una serie de aspecto primordial para un recorrido seguro de sus hijos.

Compañía: ¿sabe cuál la empresa que presta el s vicio de transporte a sus hi jos? Probablemente no. Por eso, lo primero es conocí la, verificar su seriedad (inclusive visitarla), comprobar los seguros que tiene, idoneidad de los conductores y de las monitoras a cargo de las rutas.

Vehículos: los automotores destinados para ello deben ser microbuses, camionetas, busetas y buses de menos de 10 años de antigüedad; además, contar con ce tincado de revisión técnico mecánico actualizado, y p lizas de responsabilidad civil contractual y extracontractual vigentes.

Igualmente, los vehículos deben estar identificado con las franjas propias par transporte escolar, de color amarillo y negro en forro trasversal en la parte trasera y frontal del automotor con la palabra ‘Escolar’, y el nombre del establecimiento al que pertenece.

Personal: los conducto res no solo deben haber aprobado el curso de conducción general, sino uno de transporte escolar. Por su parte, las monitoras de­ben tener conocimientos en manejo de niños en temas tan básicos como ponerles límites y atender situacio­nes de crisis. Tanto conductores como monitoras deberían asistir, por lo menos, una vez al se­mestre a cursos de actuali­zación. Si los padres de fami­lia empiezan a crear con­ciencia sobre esta necesi­dad, los transportadores ten­drán que capacitar mejor a sus empleados para la pres­tación de un transporte se­guro para sus hijos.

Itinerario: el peor conse­jero de un conductor es te­ner afán para cumplir con los horarios. Esto lo lleva a superar los límites de veloci­dad (40 kilómetros en este caso) y romper las reglas de tránsito para llegar a tiem­po a la institución. Por eso, es indispensable fijar itine­rarios realistas que contem­plen las distancias y el tráfi­co de la ciudad.

«Si cada niño se demora un minuto en salir a la ruta, los horarios se corren y el conductor tiene la presión de recuperar el tiempo per­dido para llegar a tiempo. Ahí empieza la tentación de pasarse un semáforo en ro­jo», explica Claudia Puen­tes, directora de comunica­ciones y pedagogía del Fon­do de Prevención Vial.

Sobrecupo: según el tipo de automotor, ya sea camio­neta o bus, existe un cupo autorizado de pasajeros pa­ra cada vehículo. Comprue­be que el que transporta a sus hijos cumpla esta especi­ficación y que no rompa los límites de ocupación.

Velocidad: un transpor­te escolar jamás debe sobre­pasar los 40 kilómetros por hora. El límite de velocidad va ligado a la premisa de que entre más despacio va­ya la ruta, hay menos ries­go de que la energía que se libera en un choque tenga consecuencias fatales

Sobrecupo: según el tipo de automotor, ya sea camio­neta o bus, existe un cupo autorizado de pasajeros pa­ra cada vehículo. Comprue­be que el que transporta a sus hijos cumpla esta especi­ficación y que no rompa los límites de ocupación.

Velocidad: un transpor­te escolar jamás debe sobre­pasar los 40 kilómetros por hora. El límite de velocidad va ligado a la premisa de que entre más despacio va­ya la ruta, hay menos ries­go de que la energía que se libera en un choque tenga consecuencias fatales.

Una tarea liderada por los colegios

Dentro de las medidas que tanto padres como instituciones educativas deben tomar para la seguridad de los niños, está el contratar empresas transportadoras reconocidas, que suministren toda la información personal y de trabajo de sus conductores y acompañantes [monitoras], conociendo antecedentes del conductor, su número de licencia y categoría, y los exámenes médicos pertinentes que lo certifican como idóneo para transportar niños con responsabilidad, garantizando su bienestar e integridad.

La velocidad máxima permitida en Colombia para vehículos escolares es de 40 kilómetros por hora.https://www.supertransporte.gov.co/index.php/comunicaciones-2022/supertransporte-lanza-guia-para-que-prestadores-de-servicios-centros-educativos-y-padres-de-familia-conozcan-las-normas-que-rigen-el-transporte-escolar/

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